La Cúspide del Tedio desde 2011®

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sábado, 7 de enero de 2012

Hamlet Ultrapeluche Revival



Más extraño que el paraíso
"Juan, no me malinterpretes, nomas estoy bailando"
Por Hamlet Ultrapeluche


El otro, al que le dicen el Hamlet, es al que le pasan las cosas. Yo camino por las calles del Distrito Federal y paro por un momento, quizá ya mecánicamente, para mirar a los niños inhalando cemento y escupiendo fuego, el caos multicolor del trafico, la arquitectura de ayer y de mañana, el movimiento constante de las multitudes de humanidad a las cuales no siento pertenecer, las revistas porno y los cuentos de Condorito. Yo sé de Hamlet por medio de pasquines de rock, cartelones de teatro, películas, Chekspir y Daniel Dennett. A mí me gustan los cómics de Quino, Rius, Jodorowsky, Daniel Clowes, Los invisibles y el Crumb. En cuanto a cine, me gustan Jean Luc Godard, Leos Carax, Wong Kar Wai, Woody Allen, Emir Kusturica, Roman Polansky, Jim Jarmush, el Vertov, la filosofía neorrealista, el Cahiers du Cinema, el diseño de imagen del Kurosawa y el Ozu, etcétera. En cuanto a literatura me gustan Leonard Cohen, Dostoyevsky, José Emilio Pacheco, Marcel Proust, Albert Camus, Jean Paul Sartre, J.D. Salinger, los beats como el Burroughs, Kerouac y Ginsberg, y lo que escribiesen el rey Salomón y el apóstol Juan. en cuanto a música me gustan Kraftwerk, Los panchos, Serge Gainsbourg, Wire, Iggy Pop, Air, Aterciopelados, Sonic Youth, Fobia, Belle y Sebastian, Stereolab, Momus, Boards of Canada, Pulp, Flaming Lips, Burt Bacharach, Daft Punk, Agustín Lara, Public Enemy, Cecilia Ann, Pixies, Café Tacuba, Cerati, Blur, Amon Tobin, Wagon Christ, Le Mans, At the drive in, MC5, Mussorgsky, Bowie, Chavela Vargas, Caetano Veloso, Os Mutantes, Ely Guerra, Titán, Idlewild, Jon Spencer, Massive Attack, Jane´s Adicction, Miles Davis, La Sonora Santanera, John Cage, Paquita la del Barrio, Radiohead, los Smiths, Brian Eno, Outkast, Beck, Frank Sinatra, Talking Heads, Bjork, Squarepusher, Autechre, PJ Harvey, José Alfredo Jiménez, el Esquivel y un putamadral  más. No escucho a los magneto cuando esta mi noviecita. Mi escarabajo favorito es Ringo. Prefiero a Yoko Ono que a John Lennon. De arte me gusta Duchamp, Picasso, Francis Bacon, Jackson Pollock, Warhol y Paschke y Basquiat y Schnabel y Koons. De teatro me gustan Jean Genet y Bertold Brecht y el Blanquita. De comer me encantan los tacos y las tapas y la paella y los chilaquiles y los huevos a la mexicana y los bolillos con chocolate caliente y los cuernos rellenos de chocolate que consigues en Guadalajara y los chiles rellenos de queso, el falafel y el café de chinos y el chocolate que te sirven en el Deux Magots y el agua de horchata y el helado de vainilla. Me gustan los Rolex para bucear diseñados en los sesenta porque me recuerdan a mi abuelo y a Peter Sellers en Casino Royale. Me gusta el olor a smog, el ruido. El Hamlet comparte estas preferencias, pero de manera banal que los convierte en los atributos de un actor. Sería una exageración el decir que la nuestra es una relación hostil. Yo vivo y me dejo seguir viviendo para que el Hamlet invente sus alucines, y su desmadre me justifica. Confieso que de vez en vez se avienta buenas puntadas, pero esas puntadas no pueden salvarme, quizá porque lo que es chido no le pertenece a nadie, ni siquiera a él, sino al lenguaje y a la tradición. Además yo estoy destinado a morir, y tan sólo un instante de quien soy pudiese sobrevivir en él. Poco a poquito le estoy entregando todo a él, aunque estoy consciente de sus perversas costumbres de falsificar y exagerar las cosas. Spinoza sabía que todas las cosas suspiran por persistir en su ser, la piedra quiere eternamente ser piedra y el tigre un tigre. Yo me quedaré en Hamlet, no en mí mismo (sí fuese cierto que yo existiera), pero me reconozco cada vez menos en sus "Más extraño que el paraíso" que en tantas otras cosas o en la distorsión de un Theremin o un solo de Thurston Moore. Hace meses que intenté deshacerme de él y me fuí de las mitologías del camino en el gabacho y el periodismo gonzo y la deconstrucción Dadaísta y Nietszcheana del ser a los juegos con el tiempo y el infinito (además de que tenía un chingo de tarea), pero esos juegos le pertenecen a Hamlet ahora. Acabaré teniendo que imaginarme otras cosas. Mi vida es una salida de emergencia y todo le pertenece a la nada, o a él.

No sé cual de los dos ha escrito estas líneas.




(Tomado de La mosca en la pared, número 47, -chingada madre, ya ando muy plagiador de textos, pero no creo que eso le importe a mis dos lectores, ni mucho menos que alguien mueva un dedo y se tome la molestia de reclamar derechos de autor, ¡que hueva!-)

Todos nos nutrimos de todos.