mientras callo

Mientras callo


El animal es herido en la psique desde su origen.
Manchas de tinta sobre un fondo blanco.
Palabras son palabras
 el camino
             siempre ha estado
ahí.

La lluvia
martillea
frío mármol,
recuerdo risas.

La ciudad se escucha como
                                                      ecos
de gotas

s
o
l
i
t
a
r
i
a
s
.

Cada eco se suicida
lentamente
entre ruidos
y motores extraños.
Entonces aparecen las senoidales voces de
sirenas,
ambulancias.

Todo esto es el fondo que escucho mientras
callo.

Mientras callo,
escucho cada vez más cerca los tambores de una gran guerra.
Escucho la tos de los enfermos del desamor
y a veces 
escucho
los gritos de una gata en celo pero con
miedo.

No se deja de escuchar la lluvia
tampoco los tambores
ni los motores.
La diferencia es que ahora ladra un perro
y se escuchan pasos en las escaleras.
Ahora,
los pasos han llegado a la azotea.
Se escucha como las pisadas
rompen
la tensión superficial
de algunos 
charcos.

Esto,
me recordó a El Charquito
un pequeño pueblo perdido en Wirrikuta
donde vi los ojos
verde jikuri,
más hermosos,
incrustados sobre la morena cara
de un ángel
que calmó mi sed y la de Entity.

Entity me hace sonreir
el es mi compañero de nave.
Fuimos asignados a la misma misión en ese viaje.

A veces
los maullidos de la gata en celo
me molestan.

Pero ahora que me he quedado callado
lo entiendo.
Entiendo que soy yo el que debe quedarse callado
y escuchar el celo de la gata.

Omar Blumen