La Cúspide del Tedio desde 2011®

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lunes, 2 de noviembre de 2015

Soy, después de todo



soy, después de todo
el anciano impávido que dormita
a un lado del puesto de frutas,
soy el señor con sobrepeso
que vende mercaderías,
soy el teporocho esclavo del alcohol
que vive en medio de su mugre
contando los días para que termine
su miseria.
Soy el demente que vaga en la ciudad
semidesnudo
luchando con espectros invisibles
librando batallas de arena y de olvido,
soy también
el hombre heredero de la tierra
que estaba destinado a grandes cosas
y nunca logró nada,
porque nadie logra nada
todos edifican imperios
de polvo y de éter.
Soy pues, 
el hijo predilecto de mi generación
el privilegiado
el que nunca supo que hacer
con lo que tenía,
soy el hombre que amó
que hizo grandes sacrificios
que fue hombre entre los hombres
y tuvo al mundo entre sus manos.
soy también el que cedió a la mezquindad,
el que desapareció,
el que prefirió mirar para otro lado.


Carlos Reyes.

You're just a chance I take to keep on dreaming



Hideaway
Kiesza
Sound of a Woman
2014
enjoy!

la vida es el viaje



Viaje a Ítaca

Cuando te encuentres de camino a Ítaca, 
desea que sea largo el camino, 
lleno de aventuras, lleno de conocimientos. 
A los Lestrigones y a los Cíclopes, 
al enojado Poseidón no temas,
tales en tu camino nunca encontrarás, 
si mantienes tu pensamiento elevado
, y selecta 
emoción tu espíritu y tu cuerpo tienta. 
A los Lestrigones y a los Cíclopes,
al fiero Poseidón no encontrarás, 
si no los llevas dentro de tu alma, 
si tu alma no los coloca ante ti.
Desea que sea largo el camino. 
Que sean muchas las mañanas estivales 
en que con qué alegría, con qué gozo 
arribes a puertos nunca antes vistos, 
deténte en los emporios fenicios, 
y adquiere mercancías preciosas, 
nácares y corales, ámbar y ébano, 
y perfumes sensuales de todo tipo, 
cuántos más perfumes sensuales puedas, 
ve a ciudades de Egipto, a muchas, 
aprende y aprende de los instruidos.
Ten siempre en tu mente a Ítaca. 
La llegada allí es tu destino. 
Pero no apresures tu viaje en absoluto. 
Mejor que dure muchos años, 
y ya anciano recales en la isla, 
rico con cuanto ganaste en el camino, 
sin esperar que te dé riquezas Ítaca.
Ítaca te dio el bello viaje. 
Sin ella no habrías emprendido el camino. 
Pero no tiene más que darte.
Y si pobre la encuentras, Ítaca no te engañó. 
Así sabio como te hiciste, con tanta experiencia,
comprenderás ya qué significan las Ítacas.

Constantino Cavafis